martes, 1 de enero de 2013

2013: nuevo año, nuevas quejas

Buenas tardes queridos lectores, aquí Namiko Hattori reportándose para publicar una nueva entrada en esta porquería.

Ya estamos en el 2013... No sé ustedes, pero el 2012 se me pasó bastante rápido .__.

Bueno, nos pongamos serios por un momento.

A todos mis lectores, les quiero desear un muy feliz año nuevo, que les traiga mucha suerte y oportunidades.
No suelo ser muy cursi por que detesto lo cursi, pero bue, es época de ponerse cursi, meloso y todas esas pelotudeces que la gente hace al comenzar otro año.

Esperemos que este año sea agradable, o por lo menos intentemos que sea agradable y no pidamos milagros.

Vamos, gente, yo desde hace años vengo pidiendo el mismo milagro de todos los años: que cierta gente desaparezca de la faz de la Tierra, pero no nos conceden semejante milagro, es demasiado para los dioses del Aberno, y como todo el mundo sabe, esa "gente", la cual no sirve para absolutamente nada, están en la Tierra por que nadie los acepta ni en el paraíso ni en el infierno... Son cosas que pasan, y no nos queda otra que aceptar la maldita realidad.

Hablando de realidades, me acabo de acordar que no siempre estoy en la realidad de la cual todos ustedes comparten. ¿Por qué? Simple: me encanta encerrarme en mi macabro mundo, donde la gente que odio sufre por el resto de la eternidad...

Diganme loca y todo lo que quieran, pero prefiero aislarme antes que "convivir" y compartir el mismo espacio, tiempo y aire que esas escorias humanas.

Pero vamos, que no soy la única que piensa de esa manera. ¿Cuántos de ustedes han deseado que esa personita tan especial (por especial me refiero a: imbécil, hijo/a de puta, pelotudo, tarado, escoria humana, falso/a, idiota y demás etc etc) se borre del planeta, o por lo menos, que se valla a la recalcada concha de su renegrida abuela (o cualquier pariente que se les ocurra)? 

Como dice el dicho "mantén a tus amigos cerca, y a tus enemigos aún más cerca". 


Yo tengo a los míos demasiado cerca para mi gusto. Por mí, les compraría un vuelo a la galaxia más lejana sólo de ida. Pero cuando lo pienso digo; "no, no vale la pena gastar plata en gente que no vale la pena!"


Así que bue, no me queda otra que aceptar que esas pelotudas van a seguir estando ahí, con su ego por las nubes y creyéndose Miss Universo (ojo, yo no me creo bonita para nada), creyéndose el centro del universo (cuando son un cero a la izquierda) y con su idiotez en su máximo esplendor. 


Oh, poderosísimo Hades, si haces que esas malditas escorias humanas desaparezcan de la faz de la tierra, no sólo prometo servirte eternamente, si no hacerte sacrificios humanos! Sálvame de este sufrimiento de tener que compartir, tiempo, espacio y aire con esas porquerías!





Cambio y Fuera.

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